INTROITO…
Hoy la poesía, la música,
las imágenes forman un todo
nunca soñado por un creador
si es que el creador existe
o sólo el creador es
la sombra de su tiempo
fundido en el deseo de otros.
¿Viajar a la velocidad de la poesía?
No es posible, nunca la poesía
será alcanzada por la luz.
-Azpeitia, José Antonio-
y sigo…
EN LA PIEL DE TUS DESEOS
Desnudándome de toda mi estructura
de pudores infundados
de absurdos prejuicios de este cuerpo
me visto en la piel de tus deseos.
Hoy me abandono
me entrego por entero
a la sublime lucha de ser feliz
en tu felicidad sin dudas
abierta a la incertidumbre
de lo que nunca dominaremos.
Me despojo precoz de lo inútil
¡Fuera los trapos!
El precio es alto ¡Lo sé!
Tú ya me entiendes
si es que hoy tú puedes
resistir los errores
que me inundan.
Jugar duro, apostar fuerte
medir distancias
esa es mi suerte.
Extendiendo tu mano
y yo la mía
no alcanzamos la dicha
que se oculta
en el último deseo, que es la vida.
El manantial que nace en nuestras bocas
se sumerge, crece y nos inunda
de deseos, de sueños
de profundos espacios que nos dejan
con la miel en los labios, sin tocarnos.
Ese Tántalo cruel, que es la distancia
entre las palabras y los hechos
nos castiga sin ecos, sin latidos
muertos de sed, y un dulce frío.
Escrito por Azpeitia, José Antonio
Escrito por -Azpeitia, Jos
No hay comentarios:
Publicar un comentario