MI ALMA ES DEL MAR…
(Décimas francesas con acento en 4ª y 6ª u 8ª y 10ª)
.
No quiero entrar en ese mar de glorias,
donde la fuerza es tan brutal, que estalla
y deja en dique seco las historias
del cielo gris, opaco que avasalla
esa ilusión febril del navegante,
que coge con las manos su sextante
y busca fiel deriva en otro puerto.
Un puerto amable que no tenga escollos,
donde no pueda zozobrar en hoyos
el galeón cansado, medio muerto,
que ya le crujen gavias y los foques.
El sobrecargo, está siempre en alertas,
nos prevendrá de los posibles choques,
estanqueidad de todas las compuertas.
La mar que llora espuma, nos engaña,
se vuelve amable ¡Singular patraña!
que nos confía sin mediar aviso.
Las rocas son escollos imposibles,
visten de azul total, son invisibles,
sin avisar, se cuelan sin permiso.
.
Ayer gemí, con lágrimas saladas,
pues quiero tanto al mar, que me las bebo.
Yo quiero ser marino en marejadas
y devolverle así lo que le debo.
La sal compone toda mi estructura,
de Poseidón ¡Yo soy!... La desventura
nos arrojó sobre la dura tierra,
fuimos reptiles y después humanos,
dimos la forma al mundo con las manos.
Mi alma es del mar. Los parpados me cierra…
Escrito por Azpeitia José Antonio
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