HARÉ DE TU CUERPO CANSADO POESÍA…
Haré de tu cuerpo cansado
poesía
poesía valiente
sin fronteras de engañosa luz.
Del mío rebelde, extraviado
¡No lo sé!
La carne envuelve ociosa
el alma que está limpia
es débil, sin costuras
no entiende de los versos
resultan aburridos
los leen los ilusos.
No busca trascendencias
en temas de arte puro
se mueve en la premura
de lo que es más inmediato.
Instinto, primitivo, antiguo
milenario, voraz, desordenado
primarios apetitos, nos hacen
rudos, de la gleba bestias.
Mas hoy, todo es distinto
venial y diferente.
En el bosque callado
que esconde tu materia
prendida está la llama
que quema lo superfluo
que inunda, te hace fértil
que apaga los recuerdos
volviéndolos cenizas.
Son árboles tupidos
con hojas que son grandes
escritas con mil versos
que invitan a lo inmenso.
Después que nos leemos
ya nada ha sido igual.
Prendida en el misterio
que envuelven las verdades
la carne desvanece
su larga tiranía.
Tus versos y mis versos
son libres como el aire
fronteras derruidas
grandeza de lo bello.
Recorrerán la tierra
la Red, sus aledaños
congresos de poetas
los libros editados
las páginas votivas
en ello, no habrá tregua.
No hay medios tan inmensos
que sea más locuaces.
No pediremos nada
envuelto de materia
Tan sólo el vago premio
de lágrimas perdidas
de ocasos de la vida
que piden un milagro
tan sólo el vago sueño
dolidas esperanzas
de los versos amables.
Sentir la poesía
Sentirla en lo profundo.
Escrito por – Azpeitia, José Antonio -
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